La zona de los ojos es una de las primeras en mostrar signos de envejecimiento: bolsas, párpados caídos o arrugas finas pueden hacer que te veas más cansada o seria de lo que realmente te sientes. El rejuvenecimiento de la mirada combina procedimientos quirúrgicos como la blefaroplastia con tratamientos estéticos como el ácido hialurónico, que permiten restaurar la frescura de tu expresión de forma personalizada y natural. En este artículo exploramos las opciones disponibles y cómo saber cuál es la ideal para ti.
¿Qué es el rejuvenecimiento de la mirada?
Se trata de un conjunto de procedimientos diseñados para mejorar el aspecto del área periocular (párpados, ojeras, cejas y contorno). Puede incluir cirugía —como la blefaroplastia superior e inferior—, así como tratamientos no quirúrgicos como toxina botulínica, rellenos dérmicos y bioestimuladores. La Dra. Natalia Murillo realiza un enfoque integral, adaptado a las necesidades únicas de cada paciente.
Beneficios del rejuvenecimiento de la mirada
- Mejora la expresión facial sin cambiar la identidad.
- Disminuye el exceso de piel o grasa en párpados.
- Corrige las ojeras hundidas o pigmentadas.
- Atenúa arrugas finas como las “patas de gallo”.
- Logra resultados naturales con tiempos de recuperación variables.
¿Quién puede beneficiarse de este tipo de procedimientos?
Cualquier persona —a partir de los 30 años— que note que su mirada transmite cansancio, tristeza o envejecimiento. La blefaroplastia suele indicarse a pacientes con párpados superiores caídos o bolsas en los inferiores. Los tratamientos no quirúrgicos son una excelente alternativa para quienes buscan resultados más sutiles y sin pasar por cirugía. Todo depende de la evaluación personalizada y de tus objetivos estéticos.
¿Cómo es el proceso de recuperación?
Si se realiza una blefaroplastia, el tiempo de recuperación va de 7 a 10 días, con algunas recomendaciones específicas como evitar el sol y el maquillaje los primeros días. En el caso de tratamientos como ácido hialurónico o bótox, la recuperación es prácticamente inmediata y sin incapacidad. La Dra. Natalia Murillo brinda seguimiento cercano para asegurar que los resultados se ajusten a tus expectativas.
Riesgos o efectos secundarios comunes
En la blefaroplastia pueden presentarse hematomas, inflamación o irritación ocular leve, todos reversibles con los cuidados adecuados. En tratamientos no quirúrgicos, pueden aparecer pequeñas zonas enrojecidas o leves asimetrías temporales. En ambos casos, realizar estos procedimientos con una especialista en cirugía plástica estética facial reduce significativamente los riesgos.
Casos reales o ejemplos
Te invitamos a visitar la sección “Antes y Después” para conocer pacientes que rejuvenecieron su mirada gracias a una evaluación experta e integral. Verás cómo una intervención adecuada mejora no solo la expresión del rostro, sino también la forma en la que te sientes contigo misma.
Preguntas frecuentes
¿Puedo hacerme una blefaroplastia y luego usar ácido hialurónico?
Sí. De hecho, muchas veces se combinan para mejorar tanto estructura como volumen o tono.
¿El bótox sirve para las ojeras?
No directamente. Es más efectivo para arrugas en el contorno. Para ojeras hundidas o pigmentadas se recomiendan otros tratamientos.
¿El resultado se ve artificial?
No. El objetivo es conservar tu expresión, no cambiarla. Con un enfoque profesional, los resultados son sutiles y armónicos.
Conclusión
Una mirada fresca, abierta y luminosa puede transformar por completo la forma en que te perciben… y cómo te percibes. Ya sea a través de cirugía o de tratamientos no invasivos, el rejuvenecimiento de la mirada es una inversión en tu bienestar. Agenda una valoración con la Dra. Natalia Murillo y descubre la opción más adecuada para ti.
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