DRA. NATALIA MURILLO

Colombia se ha convertido en un destino de alto interés para pacientes que buscan cirugía plástica, tanto a nivel nacional como internacional. La calidad médica, los costos accesibles y el reconocimiento de cirujanos colombianos han hecho que muchas personas consideren viajar para operarse. Esta práctica, conocida como turismo médico, puede ser segura si se planifica con responsabilidad. Pero también conlleva riesgos cuando se prioriza el ahorro por encima del bienestar. En este artículo te contamos qué debes tener en cuenta antes de tomar esa decisión.

¿Qué es el turismo médico en cirugía plástica?

Es cuando una persona se traslada a otra ciudad o país con el fin específico de realizarse un procedimiento médico o quirúrgico. En el caso de la cirugía plástica, esto incluye desde tratamientos faciales hasta procedimientos corporales como liposucción, abdominoplastia o aumento mamario.

Colombia, especialmente ciudades como Bogotá, Medellín y Cali, es reconocida internacionalmente por sus cirujanos altamente capacitados y clínicas con tecnología avanzada.

Ventajas que suelen motivar el turismo médico

  • Costo: Los procedimientos pueden ser más económicos que en países como EE.UU. o Europa.
  • Acceso a profesionales reconocidos: Colombia cuenta con cirujanas y cirujanos plásticos certificados, con experiencia nacional e internacional.
  • Privacidad: Algunas personas prefieren alejarse de su entorno mientras se recuperan.
  • Recuperación en un entorno distinto: Algunas clínicas ofrecen paquetes que incluyen hospedaje y acompañamiento postoperatorio.

Riesgos si no se hace de forma responsable

  • Falta de valoración previa adecuada: Las decisiones apresuradas por internet sin consulta presencial previa pueden llevar a errores en el diagnóstico o expectativas poco realistas.
  • Desconocimiento del entorno clínico: Es crucial verificar que la clínica esté habilitada y que el profesional esté certificado.
  • Recuperación insuficiente antes de viajar de vuelta: Algunos pacientes quieren regresar pronto a su país o ciudad, lo cual puede comprometer la cicatrización, controles o manejo de posibles complicaciones.
  • Aislamiento o falta de red de apoyo: Estar lejos de casa puede dificultar la atención emocional o práctica durante el postoperatorio.

Recomendaciones clave antes de viajar por cirugía

  1. Elige una cirujana certificada y solicita una valoración previa completa, idealmente presencial o por videollamada con historia clínica.
  2. Verifica la habilitación de la clínica y que cuente con unidad de cuidados postoperatorios y soporte de emergencia.
  3. Pregunta por acompañamiento médico durante tu estadía, y si es posible, agenda controles antes de tu regreso.
  4. Evita paquetes “todo incluido” sin transparencia médica. Lo más importante es tu salud, no la cantidad de noches de hotel.
  5. Consulta con tu médico de cabecera si tienes condiciones previas o estás en tratamiento por enfermedades crónicas.

Preguntas frecuentes

¿Cuánto tiempo debo quedarme después de una cirugía?

Depende del procedimiento. En general, se recomienda permanecer al menos entre 7 y 15 días para asegurar una recuperación inicial adecuada y poder asistir a los controles.

¿Puedo operarme sin valoración previa presencial?

No es recomendable. Una buena profesional siempre pedirá una valoración médica detallada antes de programar una cirugía.

¿Qué pasa si tengo una complicación en mi ciudad de origen?

Si no hay un seguimiento adecuado, los médicos locales podrían desconocer el procedimiento exacto, lo que dificulta el manejo. Por eso, el acompañamiento postoperatorio y la comunicación con tu cirujana son esenciales.

Conclusión

El turismo médico puede ser una opción segura si se aborda con información, criterio y acompañamiento profesional. Antes de viajar por una cirugía plástica, asegúrate de hacerlo por las razones correctas, con una cirujana certificada y con un plan médico claro. La Dra. Natalia Murillo ofrece una experiencia ética, segura y cercana para pacientes que vienen de otras ciudades o países.

Solicita tu valoración previa